Zum Inhalt der Seite

Los sellos elementales

von

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Seite 1 / 1   Schriftgröße:   [xx]   [xx]   [xx]

El nuevo miembro

“Mi nombre es Tsukimori Hana. Encantada de conoceros.” Hana les hizo una muy educada reverencia a los demás.

Era una chica de aspecto joven (aunque teniendo en cuenta que Rukia llevaba ya más de cincuenta años como shinigami, no se podía asegurar), de metro setenta de estatura, según calculó Ichigo, y muy buena figura según apreció Renji. El pelo, al parecer largo y de un bonito color caoba, estaba recogido en un moño detrás de la cabeza. Su rostro, sonrojado ligeramente, tal debido tal vez a la vergüenza, mostraba una inocencia solo vista por Ichigo en Inoue. Sus ropas eran similares a los de Ichigo y el resto de shinigamis, pero con la salvedad de que el color era de un color rojo oscuro y la ausencia total de mangas.

A Yoruichi, sin embargo, no se le escapó un ligero detalle. Sus ojos, inocentes y tímidos de un color verde, innegablemente preciosos, tenían un ligero brillo de tristeza que la joven parecía tratar de esconder.

Tras terminar las presentaciones, todos se sentaron alrededor de la mesa con la intención de conocer a la recién llegada y para discutir lo que harían.

La primera pregunta la hizo Urahara.

“Dime, Tsukimori-san. En qué rango estás de tu escuadrón?”

Ella agachó ligeramente la cabeza. ”Aún no me han colocado en ningún escuadrón. Acabo de salir de la academia de Seebutsunigamis.”

“Cómo?!” Madarame Ikkaku saltó de repente. ”Aún no estás en un escuadrón? Se puede saber a quien nos han enviado?”

Todos le lanzaron una mirada que claramente le decían que se callase.

“Lo siento. Apenas me gradué me informaron de que me enviaban a ayudaros con la búsqueda de los sellos.”

La moral de la joven parecía que iba a quedar por los suelos, por lo que la sabia Yoruichi intervino.

“Si te han enviado a ti, que todavía no perteneces a ningún escuadrón, me imagino que será porque posees muy buenas habilidades, conocimientos y aptitudes. Dudo que el mundo elemental, en especial sus jefes, sean unos incompetentes.”

Una tímida sonrisa de agradecimiento apareció en el rostro de Hana, lo cual alivió la tensión causada por Madarame.

“Por cierto, Hana-san.” Intervino Ichigo. ”Has dicho Seebutsunigami, no? Es como nosotros los Shinigamis, no es así?”

“Si, es cierto. Vosotros los Shinigami (dioses de la muerte) controlais el ciclo de la muerte y las almas. Nosotros los Seebutsunigami (dioses de la vida) controlamos lo que permite que los seres vivos existan, los elementos.” Hana explicó muy correctamente la diferencia entre ambos trabajos, no dejando ninguna duda en la mente del shinigami sustituto.

“Entiendo. Gracias por explicarmelo.” Agradeció con una sonrisa, respondida con otra algo tímida de hana.

“Qué notas sacaste en el examen de Kido?” Continuó la gata.

La aludida enrojeció hasta las cejas en un instante. ”P…p…pues…yo…”

“Aquí tengo un documento con sus datos académicos. Me los dio el capitán Kuchiki justo antes de pasar la puerta Senkai para que te los diese a ti.” Ikkaku rebuscó entre sus ropas y sacó unos papeles que le pasó a Renji, que los examinó, ante la mirada asustada de hana.

Pero la mirada de asombro de Renji y de Ichigo, que también leyó por encima del hombro de su amigo, fue total. ”Cómo?! Ha obtenido las notas más altas en todo!”

Todos los demás, excluyendo a Ikkaku, Urahara y Yoruichi, se agolparon detrás de Renji para leer tambien. ”Kido-100, Bakudo-100, Kendo-100, estrategia de combate-100… No hay ningún campo en el que no haya sacado la mejor nota. Es impresionante!”

“Y ya tiene capacidad de liberar su Zanpakuto. Impresionante.” Rukia no salía de su asombro.

“E…ese dato es incorrecto.”

Todos giraron la cabeza en su dirección. El sonrojo había desaparecido siendo sustituido por una cara apenada. ”No soy capaz todavía de liberar.”

Yoruichi la miraba fijamente. “No sabes mentir, pequeña.”, pensaba, “Tal vez los engañes a ellos, pero no a mi, y tampoco a Kisuke”, Añadió mirando a Urahara, el cual le devolvía la misma mirada.

Renji prosiguió. ”Bueno, aún sin saber liberar si alguien se enfrenta a ti eres un hueso muy duro de roer. Personalmente no quisiera enfrentarme a ti.” Todos asintieron secundando el comentario.

“Si eres tan buena, me imagino que también dominas los Shunpos, no es cierto?” Yoruichi sonreía pícaramente.

Renji buscó ese dato en el documento antes de que Hana pudiese contestar.”Pues según esto, también ha conseguido una alta…”

“Abarai Renji, le he preguntado a Hana. Quisiera que ella me contestase por sí misma, si no te importa.” Interrumpió la gata fieramente.

El pelirrojo captó la indirecta y se calló. Hana, por su parte, parecía un pimentón de tamaño humano que pegaba con el color de su ropa.

“S…si. Sé hacer Shunpos.”

“Cuántos puedes hacer seguidos? Cuarenta y cinco?”

Ella negó con la cabeza.

“Do…dos…”

“Dos? Vaya, deben ser muy rápidos y largos para que te den tan buena nota.” Dijo Yoruichi sinceramente asombrada.

Pero Hana volvió a negar con la cabeza y tragó saliva.

“Doscientos cincuenta.”

El silencio fue sepulcral. Una mosca que consiguió entrar en la habitación voló entre los asistentes causando un gran alboroto con su zumbido. Afuera, Tessai reprendía a Jinta por haber jugado con Kon dentro de la tienda, y les parecía que estaban prácticamente al otro lado de la puerta del silencio que había dentro de la habitación.

Yoruichi no podía sino mirar con gran asombro a la joven que tenía ante sí. Doscientos cincuenta Shunpos seguidos a su edad! Y apenas acababa de salir de la academia! Obviamente se encontraban ante un prodigio, la próxima “Reina de los shunpos” del mundo elemental.

Y aún así sus ojos brillaban tristes.

“Vaya, vaya, vaya. En ese caso tendré que defender mi título.” La gata se levantó y se encaminó hacia una puerta lateral que llevaba a una habitación.

Urahara no pudo evitar preguntar. ”Yoruichi-san. No pretenderás competir con esta sorprendente joven a ver quien hace más Shunpos, verdad?”

La aludida giró la cabeza, mirando burlonamente a su antiguo subordinado. ”No seas tonto, Kisuke. Solo voy a ponerme algo de ropa.” Su mirada se posó en Ichigo. ”Aunque tal vez Ichigo prefiera que me vista aquí.”

“ Cuándo he dicho yo eso?! Lárgate y cámbiate de una vez!”

Una mirada aún más burlona y pícara fue toda respuesta antes de desaparecer por la puerta. La luz, que estaba al otro lado de la habitación, lanzaba sombras a la puerta cerrada, bien visibles desde el otro lado, que a varios los hicieron enrojecer o colocarse bien las gafas.

Al poco, Yoruichi Shihouin, La Reina del Shunpo, apareció por la puerta. La joven Hana se quedó sin habla al ver que el gato se había transformado en una alta mujer de piel oscura, muy bella y con un aura llena de confianza en sí misma.

“Bien. Cuando queráis salimos.” Dijo con una sonrisa de oreja a oreja.



Fanfic-Anzeigeoptionen

Kommentare zu diesem Kapitel (1)

Kommentar schreiben
Bitte keine Beleidigungen oder Flames! Falls Ihr Kritik habt, formuliert sie bitte konstruktiv.
Von:  iodel11
2010-12-14T22:20:49+00:00 14.12.2010 23:20
Dios, que tia mas tocha eh, como se nota que le tienes cariño (claro claro, como es tu pnj del Guild wars, cof cof cof...)
Mola este capitulo!!... a ver cuando sacas el siguiente nene, que la gente espera!! jejeje
Un abrazote muchacho!!!! y sigue asi :3


Zurück